-Espera que piense -hice una pausa, reflexionando entre una multitud de datos, de recuerdos y fantasías-, ha de estar bien buena, que me quiera y no llegue a aburrirse de mis ocurrencias.
-Sí, claro, eso queremos todos.
-¡Ah -exclamé-, y que no me cueste dinero!
Estallamos en mil carcajadas incontroladas, séquito burlón de aquella pequeña verdad madre de tantas frustraciones.
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Imagen extraída de la película "Coffee and cigarettes" de Jim Jarmusch. El texto no tiene nada que ver.
3 comentarios:
Utopias? nosotras ya ni nos reimos majo!
Guapo, inteligente, fiel, agradable... La búsqueda del príncipe azul se quedó para disney, nos conformamos con tener esa conversación de la siguiente manera:
"no me hace caso, me pide dinero, su madre, de la que es dependiente, me odia, le huelen los pies... (etc, etc.)... Aunque al menos es (y 1 sólo 1 cualidad q le encontremos)"
Si es que hay q conformarse con lo que hay!
Eso es que os falta sentido del humor y os sobra exigencia, así que queréis compensar nuestras carencias infinitas con dinero y regalos...
...luego pasa lo que pasa.
Jajajaja.
PD: un tío que pida dinero, vaya desgraciao, no tiene ni la más mínima decencia.
Por cierto: dame argo paya, que tengo jambre.
Jajajaja, estoy con Isa. La búsqueda de los ideales ya se nos queda al laíco' de la Cenicienta y su príncipe maligno.
Vosotros cada vez lo poneis más difícil y nosotras nos cansamos de follarnos a sapos. A ver si tú exigirías más o no!
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