He vuelto.

domingo, noviembre 30, 2008

16 del 30.6


El placer que provoca desmontar

la cabeza, neurona a neurona,

y reconstruirla dejándolo todo

del revés es algo que... joder...

me faltan las palabras...

es una sensación tan extraña...

Sí, ya sé, la agonía

sigue estando ahí, pero las canciones

suenan diferentes. Algo falla.

Es como si yo no fuera yo.

Es como si enredaderas de notas

subieran por mis sienes, creando mosaicos

tan coloridos...

tan dolorosos...

Subo el volumen, el corazón me late

al ritmo de dieciséis balas

del calibre treinta punto seis;

dieciséis balas que me agujerean,

que me hacen comprender que las cosas

son siempre iguales, todas

ellas, salvo matices,

lo único que

difiere es la profundidad

de la resaca.

2 comentarios:

Isa dijo...

Uff casi siento yo la resaca! menos mal que yo no salí anoche! Animo con el domingo, zumito de tomate, aspirina y a esperar q pase!

[..La chica triste que te hacía reír..] dijo...

Para la resaca ya se sabe...
Escribir cosas así y hacérsela sentir a otros.
;)