Expresión

Otra vez me hundo en el fango de la impotencia
al ver cómo la inmensidad del universo que vive en mi cabeza
se empequeñece hasta ser un punto, un triste punto,
la nada matizada,
que soy incapaz de hacer crecer, de utilizarlo para construir algo,
lo que sea,
nada,
¿para ésto llevo tantos años escribiendo, tocando, intentado crear?
Será que aún no estoy preparado para diseccionarme
pero mientras tanto me veo marchitándome,
volcado en un algo que parece inútil,
me consumo y el camino que tomé es cada día más tortuoso, intrincado,
retorcido hasta descender al infierno
y sé perfectamente que la Gorgona me está esperando para guiñarme un ojo.

...como lágrimas en la lluvia.

¡Que te jodan!

Las maravillas las tengo, pero aquí dentro arden,
me trepanaría si supiera que sirve para algo.
Me emborracharía si supiera que sirve para algo.
Me ahorcaría, pero eso es la salida fácil,
¡conviérteme en alguien digno de ti y escúchame!

Trabajo con barro y llueve,
y se va ladera abajo, mezclándose con la basura y la mierda
y el niño no dirá que el mar le parece una mierda, que no es hermoso
porque conmigo los niños no hablan,
no me ven como alguien de confianza.
Mejor así, gracias a eso puedo dedicarme a pudrirme poco a poco
construyendo grandes obras en un eructo silencioso
entre las paredes del zulo donde reposan los huesos de los olvidados
junto con la esperanza de encontrar la forma de expresarme
que me sirva.

La violencia

La violencia es parte del comportamiento humano. Estamos donde estamos gracias a la violencia, gracias a los violentos que pusieron bombas, a los que cortaron cabezas,
sin embargo la no-violencia basada en la violencia latente que desprende la amenaza del terror de estado es lo que poco a poco va erosionando las pocas libertades que unos héroes nos dieron a base de arriesgarse al sobreponerse al terror de la misma.

En la cima del mundo

Para poder encontrar un poco de silencio
necesito bucear en el peor de los ruidos,
es la única forma que tengo para huir del recio
sexo de un cráneo vacío que ansía fluidos,

porque lo necesito para encontrarme a mí mismo
entre tanta mierda que sube hasta las pestañas
me ahoga y me convulsiona con el sismo
del estreñido al vaciar con dolor sus entrañas

y el vértigo al pensar que no tengo futuro
me invade, es demasiado fuerte, intenso,
por mucho que intente parecer tan duro
lo único que logro es ponerme tenso

y darme cuenta que por mucho que lo intente
solo depende de mí elegir donde pasaré hambre
convertido en un simple y vulgar cliente
de la red de corrupción de honda raigambre.

Para sobrevivir, joder, tengo que irme de aquí,
ya no es seguro permanecer en la misma comarca
donde tampoco hace tantos años que nací
y que hoy es otro feudo del tuerto monarca.

La mierda es la levadura de la hostia consagrada
que tragamos todos como hijos de una misma iglesia
neoliberal, la esclavitud se asoma descarada
sobre las masas que se enrogullecen de su amnesia,

¿a dónde iré? quienes me oyen me miran como apestado,
solo digo que se regalen un momento y unan cabos,
no pido mucho, solo un poco de razonamiento ligado
y no Sálvame con rayas de farlopa sobre los rabos,

sólo necesité un poco de sentido común para enterarme,
si yo pude tú igual, encuéntrate allá donde estés,
conviértete en la pieza clave de tu propio rearme,
nadie se preocupará por ti en este mundo al revés.